Bienvenid@ a la página web "Terapia de pareja en Valencia: psicólogos especialistas." en la que puedes obtener una completa información y contenidos acerca de mi trabajo y orientación en el área de la terapia de pareja, relacional, matrimonial y familiar. Soy Javier Brotons Miró, psicólogo por vocación especializado en la orientación social, relacional, de pareja y matrimonial y por otra parte también me especialicé en psicología de la salud (psicoterapia), con más de 25 años de experiencia profesional atendiendo consultas e interviniendo en la resolución de los conflictos y las crisis de parejas. Estoy colegiado desde 1992 por el Colegio Oficial de Psicología de la Comunidad Valenciana ( antes denominado colegio de psicólogos), grado de máster, acreditado como psicólogo general sanitario por la Consellería de Sanidad y soy docente e investigador en psicología (área de psicología social) en la Universidad pública Jaume I (Uji), lo que me permite una constante actualización en conocimientos y práctica a través de la investigación en estas disciplinas de la psicología.
Mi misión es mejorar el bienestar psicológico y la salud mental y emocional de todas las personas a las que atiendo en consulta -individualmente o en pareja-, teniendo siempre muy en cuenta sus características personales, vitales y sociales.
Además, trabajo con un equipo multidisciplinar integrado por los mejores psicólogos en Valencia para cubrir adecuadamente las necesidades de mis pacientes.
Gracias por tu visita a nuestra web.
Evaluación, diagnóstico y tratamiento de los problemas y los conflictos de pareja.
La terapia de pareja (o psicoterapia de parejas) es el proceso terapeútico eficaz para abordar y solucionar problemas de falta de comunicación, infidelidad, insatisfacción sexual, pérdida, maltrato, abuso, celos y celos patológicos, problemas con los hijos, problemas con las familias de ascendencia, choque de valores, a hacer frente a acontecimientos traumáticos, problemas de convivencia y afrontar (llegado el caso) la decisión de separación y/o divorcio, a través de la mediación e intervención para la eliminación de los conflictos y el fomento constante del mutuo acuerdo.
La consulta cuenta con un equipo formado por los mejores psicólogos para la solución de problemas de pareja y cualquier problema que pueda surgir en el entorno familiar.
En terapia de pareja en primer lugar, el psicólogo especializado realiza una evaluación de la situación (tanto en pareja como de forma individual, teniendo en cuenta las características personales de cada uno de los miembros de la relación) para conocer cuáles son los problemas que se tienen y si estuviesen planteados, los objetivos que se quieren conseguir con la terapia, y definir así el tipo de intervención que se necesita llevar a cabo.
La duración de la terapia es siempre limitada en el tiempo, aunque el número de sesiones o consultas está en función de cada pareja, del número de conflictos y problemas a tratar, de si hubiese que abordar problemas externos a la relación que pudiesen estar afectando, de si hubiese algún problema específico de índole clínica en alguno de los miembros de la pareja (por ejemplo depresión o un trastorno de ansiedad), etc.
Durante la terapia se analizan los problemas que afectan a la relación para tener una mayor comprensión de ellos, aprender a resolverlos y analizar las diferencias de manera racional, a reconocer cuáles son las ideas o creencias erróneas que cabría modificar, a detectar cuáles son los comportamientos y actitudes que deben ser cambiados y aprender cómo hacerlo, a escuchar, comprender y aceptar a la otra persona así como aceptar las diferencias individuales.
En este sentido la terapia de pareja es eminentemente práctica, ya que se establecen pautas que de forma consensuada la pareja llevará a cabo para conseguir los objetivos establecidos y por tanto una sensible mejoría en la relación.
Como en cualquier relación interpersonal, la relación de una pareja, puede atravesar por momentos de dificultad dependiendo de las circunstancias, los cambios personales, las demandas del entorno y el paso del tiempo.
CONTACTO:
Javier Brotons. Psicólogo especialista en terapia de pareja. Whatsapp: 600440004.
Para contactar o concertar cita házlo por Whatsapp 600440004 ya que suelo estar en consulta y me resulta complicado atender el teléfono en el momento, indicando si sería en Castelló o en Valencia.
La terapia de pareja ayuda a superar los problemas, dificultades y crisis que se presentan en la relación, así como a afrontar acontecimientos traumáticos que se puedan producir como la aparición de una enfermedad grave, la muerte de un familiar, etc.
En las parejas se pueden vivir procesos de distancia, infidelidad, pérdida, maltrato o abuso, o simplemente el proceso de extinción de la relación. Sea cual sea la situación, es importante que si no es posible superarlos por si mismos se recurra a buscar ayuda de un profesional.
Pero la terapia de pareja no sirve solo para parejas con problemas, sino que incluso una pareja con una buena relación puede acudir a un psicólogo especializado en relaciones de pareja para aprender a comunicarse mejor, prevenir futuros conflictos y tener una relación más armoniosa y duradera, así como fortalecer sus vínculos y conocerse mejor el uno al otro.
Ubicación de la consulta en el centro de Valencia: C/Baldoví, 2, 1-A. 46002 Valencia.
Javier Brotons. Psicólogo col.CV.03246. Especialista en terapia de pareja e intervención familiar, grado máster y docente e investigador en Universidad pública (Jaume I, facultad de psicología -Ciencias de la Salud-), área de psicología social. Atención presencial.
Rosa Ana Bonora. Psicóloga col.CV05037. Especialista en terapia de pareja y en el tratamiento e intervención en duelo gestacional y neonatal en parejas. Atención presencial.
Mónica Redondo. Psicóloga/sexóloga col.CV16899. Experta en intervención sexológica en parejas. Atención exclusivamente online.
Francisco González. Posgrado en mediación familiar y abogado colegiado. Especialista en mediación y resolución de conflictos familiares y de pareja. Atención presencial.
CUÁNDO ACUDIR.
- Cuando la relación comienza a deteriorarse y no se va clara la salida.
- Cuando alguno de los miembros siente que la relación depende en mayor medida de él ("siempre tiro yo del carro").
- Cuando ha habido una infidelidad pero existe la voluntad de superarla.
- Cuando hay una percepción de desigualdad.
- Cuando hay ausencia o pocas demostraciones de afecto.
- Cuando aparece un problema externo a la relación que es difícil de afrontar: enfermedad grave, problemas con la familia de origen, muerte de un familiar.....
- Cuando aparecen conflictos que se alargan en el tiempo: conflicto por no repartir responsabilidades (domésticas, con los hijos...), conflictos con las amistades, conflictos con la economía (cómo se manejan los recursos), cómo se invierte el tiempo de ocio...
- Cuando existe una constante y persistente intromisión o intentos de intervención de la familia política.
- Cuando existen problemas de comunicación o se ha deteriorado sensiblemente.
- Cuando aparece la insatisfacción sexual.
- Cuando sencillamente se quiere mejorar la relación.
- Cualquier otro motivo que pueda suponer un problema o distorsión en la relación como por ejemplo una separación por motivos profesionales.
"Se sabe que ocasionalmente una pareja recurre como una última alternativa a un proceso psicoterapéutico. Psicólogos clínicos especialistas en el tratamiento de parejas a lo largo de la práctica explican que una pareja suele esperarse entre cinco o seis años de que empiezan los problemas para pedir ayuda. Asisten al último momento cuando se ha estado ya muchos años acumulando heridas emocionales: frustración, enfados, celos, decepciones, distanciamiento. Es importante que la terapia se convierta en una herramienta preventiva. Acudiendo antes se tiene un 70% más de probabilidad para que la terapia de pareja sea beneficiosa y la relación alcance un éxito y se desarrollen perspectivas positivas de futuro en la relación."
¿CUÁNTO DURA LA TERAPIA DE PAREJA?.
La duración de la terapia suele ser limitada en el tiempo, aunque el número de sesiones dependerá de cada pareja, del número de conflictos a tratar, etc. Puede requerirse desde unas pocas sesiones para tratar un problema puntual hasta varios meses en casos de relaciones muy deterioradas.
¿QUÉ COSTE TIENE?
Las sesiones de terapia de pareja tienen un coste de 70 € por sesión (se aplican las tarifas mínimas legales establecidas por el colegio oficial de psicólogos de la Comunidad Valenciana) y éstas tienen una duración aproximada de una hora y cuarto: las sesiones de terapia de pareja requieren de un tiempo adecuado (hay que realizarlas sin prisas y sin tener que estar mirando constantemente el reloj) para que no se distorsione la comunicación por estrés.
TAMBIÉN PUEDE PRODUCIR LOS SIGUIENTES BENEFICIOS:
DIVORCIO O SEPARACIÓN.
El hecho de que se le llame terapia de pareja no implica por fuerza que quede reservada sólo a parejas o matrimonios. Cuando se vive un proceso de separación como el divorcio también se puede recurrir a la terapia para entender de qué forma se está relacionando la pareja en esta situación de cambio, superar el duelo por la pérdida y la separación, y estar preparados para vivir de mejor manera las nuevas perspectivas y posibibilidades que se presentan a cada uno de los miembros de la pareja a partir del "cambio de vida".
PROGRAMAS PERSONALIZADOS PARA AFRONTAR EL PROCESO DE DUELO DERIVADO DE LA SEPARACIÓN O DIVORCIO
El maltrato psicológico en la pareja, desafortunadamente es uno de los males de las últimas décadas. Los hay de varias intensidades pero no por
eso un nivel es más bueno que otro. Generalmente la persona que los propicia es insegura, acomplejada, sin autoestima y tiene una necesidad imperiosa de imponer, manipular y
controlar.
La persona que maltrata se vale de éstos medios para ejercer un poder y autoridad que rebajan y humillan a quien los recibe. Digamos que quien necesita manipular lo hace
para sentirse en una posición de superioridad, por lo que busca a través de gestos, palabras, insultos e incluso indiferencia que su víctima, de forma consciente o no, crea lo que se le dice e impone
y se someta a la voluntad de su agresor.
LA CONVIVENCIA.
La convivencia es uno de los puntos clave en cualquier relación y en muchas ocasiones es el detonante de los problemas. Saber convivir es muy importante para que una pareja funcione y se mantenga unida. Repartir tareas, ayudar, colaborar, tomar decisiones juntos, ser solidarios el uno con el otro son algunos de los pilares de la convivencia. Cuando en la relación no hay cooperación por parte de uno o de ambos miembros de la pareja la convivencia se convierte en una campo de batalla de reproches, insultos y frustración causados en muchas ocasiones por las convicciones tradicionales a las que estamos acostumbrados. Hoy en día muchas parejas discuten constantemente por el tema de las tareas del hogar, todo resultaría mucho más sencillo si en vez de echarnos las cosas en cara dedicáramos el tiempo necesario para hablarlo y llegar a un acuerdo.
Otro aspecto clave en la convivencia de cualquier pareja es la libertad individual de cada miembro: su autonomía. Esto significa que cada uno tenga espacios de tiempo para desarrollarse como persona y aportar elementos nuevos para enriquecer la relación. Las parejas más estables y las que mejor se llevan son aquellas que han aprendido a dejar un espacio libre entre ambos, respetándose el uno al otro. A lo largo de la convivencia encontraremos diferentes situaciones que podrán ser causa de conflicto, como la falta de comunicación, la rutina, las respectivas familias, los hijos, la economía, etc., pero debemos tener siempre presente que convivir en pareja es vivir con otra persona en términos de amor, igualdad, comprensión, tolerancia y respeto.
La terapia de pareja desde esta perspectiva es muy eficaz porque no sólo trabaja el problema de comunicación en la pareja dando recursos a ambos miembros, sino también da recursos individuales para la superación de la crisis. La relación de pareja suele pasar por dos fases generales:
(1) "Enamoramiento": en general se trata de una relación íntima sin apenas problemas prácticos, donde se activan una serie de creencias y expectativas románticas (MITOS, fase de "Idealización de la relación").
(2) "Cotidianidad": se produciría una frustración de expectativas y creencias románticas ("Desilusión"), irrumpirían una serie de problemas prácticos (hijos, finanzas, toma de decisiones, etc.) y se "activarían" el "Pacto matrimonial" (Perspectivas personales, supuestos personales o esquemas cognitivos latentes; que mientras más egocéntricos sean, mas disfunción van a generar). Estos esquemas cognitivos suelen girar en torno a dos contenidos temáticos: (1) Interés afectivo y (2) Valoración personal. Se habrían desarrollado a partir de modelos familiares (relaciones parentales) y otras experiencias (p.e historia de pareja). La conducta de cada miembro de la pareja lo podría activar, y esa activación produciría una serie de distorsiones cognitivas que llevaría a una serie de círculos viciosos de estilos personales de relación inflexibles, sobretodo en tres áreas: comunicación, expresión afectiva y resolución de problemas.
TERAPIA DE PAREJA PARA SUPERAR LA INFIDELIDAD.
Iniciar un proceso de terapia puede permitir:
La terapia de pareja es una oportunidad para tomar conciencia y aprender cómo se generaron los conflictos y desencuentros. A través de la terapia de pareja se crea un nuevo espacio adecuado para que ambos miembros se escuchen de forma proactiva, desde una nueva posición, facilitándoles nuevos instumentos de relación que les permitan volver a encontrarse emocionalmente. Este nuevo espacio les facilitará también un crecimiento y desarrollo personal y la posibilidad de volver a construir así una relación basada en el respeto a la autonomía y los valores personales para poder compartirlos. Una relación debe ser dos personas que voluntariamente deciden compartir un tiempo y un espacio en común para disfrutar cojuntamente de ello.
DISPONEMOS DE UN SERVICIO DE MEDIACIÓN PROFESIONAL PARA LLEGAR A ACUERDOS EN CASO DE DIVORCIO//SEPARACIÓN.
TERAPIA DE PAREJA EN PAREJAS HOMOSEXUALES.
Las parejas homosexuales asisten cada vez más a las terapias donde buscan respuestas a problemáticas que son similares a las de parejas heterosexuales, en tanto la preocupación respecto de cómo prepararse para tener hijos es un motivo cada vez más frecuente en la consulta. Con respecto a lo específico en la terapia con parejas homosexuales, «una de las claves es entender el contexto que enfrentan y trabajar en ese sentido; hay que estar atentos porque hay temas particulares que sufren como la homofobia o la discriminación». En relación con las funciones y roles dentro de la pareja, «lo interesante es que es posible para cada uno de los miembros de la pareja asumir los roles materno y paterno independientemente del género». Tanto los temas de género como los de sexualidad están presentes en todas las personas, homosexuales y heterosexuales. «Si el terapeuta está particularmente abierto a escuchar estas cuestiones, los pacientes pueden con cierta facilidad abrir temas vinculados a la atracción homoerótica en parejas heterosexuales, y al revés, en parejas homosexuales hablar sobre cierta atracción hacia el sexo opuesto. Con respecto a los hijos de parejas homosexuales que asisten a terapias familiares, «los problemas son los mismos; el eje pasa por entender cuáles son los significados y cuáles son los temas que estos niños tienen que afrontar». Dentro del contexto terapéutico, es cada vez más frecuente, que las parejas homosexuales van a la consulta porque quieren tener hijos y prepararse, saber cómo es este tema». Los niños que crecen en familias de gays o lesbianas tienen la misma evolución que niños criados en familias más convencionales y la evolución es la misma e incluso ligeramente superior en cuestiones que tienen que ver con la apertura social.
TERAPIA COGNITIVO Y CONDUCTUAL.
La terapia de pareja desde esta perspectiva es muy eficaz porque no solo trabaja el problema de comunicación en la pareja dando recursos a ambos miembros, sino también da recursos individuales para la superación de la crisis. La relación de pareja suele pasar por dos fases generales: (1) "Enamoramiento": en general se trata de una relación íntima sin apenas problemas prácticos, donde se activan una serie de creencias y expectativas románticas (MITOS, fase de "Idealización de la relación"). (2) "Cotidianidad": se produciría una frustración de expectativas y creencias románticas ("Desilusión"), irrumpirían una serie de problemas prácticos (hijos, finanzas, toma de decisiones, etc.) y se "activarían" el "Pacto matrimonial" (Perspectivas personales, supuestos personales o esquemas cognitivos latentes; que mientras más egocéntricos sean, mas disfunción van a generar). Estos esquemas cognitivos suelen girar en torno a dos contenidos temáticos: (1) Interés afectivo y (2) Valoración personal. Se habrían desarrollado a partir de modelos familiares (relaciones parentales) y otras experiencias (p.e historia de pareja). La conducta de cada miembro de la pareja lo podría activar, y esa activación produciría una serie de distorsiones cognitivas que llevaría a una serie de círculos viciosos de estilos personales de relación inflexibles, sobretodo en las siguientes áreas: comunicación, expresión afectiva y resolución de problemas.
En nuestro centro especializado en terapia de pareja también ponemos a tu disposición los servicios complementarios de: gabinete de psicología jurídica (Jurister psicólogos) y gabinete de mediación familiar (CMmediate Valencia).
¿FUNCIONA LA TERAPIA DE PAREJA?.
La terapia es mucho más eficaz si se acude nada más observar el malestar en la relación que si se deja pasar y pasar el tiempo hasta que el desgaste pueda más que cualquier cosa. De hecho, el porcentaje de éxito de una terapia de pareja está en torno al 70%. Sin embargo, es mucho más alto si la pareja acude antes, como mucho, dos años después de que aparezcan los primeros problemas.
Pero la realidad es otra bien distinta según reflejan diferentes estudios, centrados en parejas que acuden a consulta ya que se suele esperar entre cinco y seis años en acudir a terapia, a pesar de haber observado indicios de que la relación no funciona tan bien como les gustaría. En estos estudios no se contemplan a las parejas que nunca acudirán a terapia. Sea como fuere, la realidad es que, por desgracia, el perfil de parejas que acuden a consulta suelen ser el de una pareja que a pesar de saber que aún se quieren, llevan años acumulando frustración, enfados, decepciones, distanciamiento y frialdad.
Mi forma de enfocar la terapia de pareja se basa principalmente en: fomentar el crecimiento personal y la autonomía de cada uno de los miembros de la pareja para lograr una comunicación basada en compartir experiencias y vivencias propias, que nutran y enriquezcan el espacio común de la relación; la comprensión y aceptación de los valores y creencias del otro para fomentar el respesto hacia los mismos y así evitar "choques" que resulten lesivos en la relación y la creación de estrategias de afrontamiento para resolver cualquier acontecimiento que pueda "entorpecer" el adecuado desarrollo de la misma.
Parto de una concepción dinámica de la relación que implica necesariamente un desarrollo y una evolución común que se sustenta en gran medida en un crecimiento personal, que debe alimentar las expectativas positivas de futuro conjuntamente con la pareja e implicando necesariamente un tiempo y un espacio compartidos.
El papel del psicólogo en la terapia de pareja es propiciar las condiciones y herramientas necesarias para que los dos miembros de la pareja puedan escucharse, comunicarse, afrontar dificultades y necesidades (tanto individuales como interpersonales) que alteren su funcionamiento y bienestar.
En los últimos años ha habido un gran incremento en el número de parejas que solicitan los servicios de terapia de pareja. Entre los factores que influyen está el hecho de que se ha avanzado muy positivamente en la libertad para plantear las quejas en la propia pareja, y que la terapia de pareja ha demostrado su eficacia y se tiene cada vez más confianza en la labor profesional de los psicólogos.
"La pareja humana no es pareja, en el sentido de no ser igual; supone la diferencia. Tampoco es semejante, ni parecida, ni similar, ni idéntica, ni lisa; está llena de facetas. No es tampoco una organización homogénea o monótona. Tampoco es continua, ni es tersa o suave, aunque su definición nos lleva a pensar en esos sinónimos. Por el contrario, la pareja humana supone contrastes, variaciones e inestabilidades que pretenden la estabilidad"
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